Tuesday, October 04, 2011

Deslumbrada

Ya no hay tiempo para escribir. Es como decir que ya no hay tiempo para amar. Y a veces me pasan esa clase de frases por la mente, mientras sigo con la cabeza hundida en la pantalla de la computadora.

Mi tiempo se resbala, como arena, como si me lo estuvieran robado los hombres grises de Momo. Pero en realidad no es culpa de nadie más. Yo soy la que me diluyo entre obligaciones auto-impuestas, cansancios, ojeras, estrés y pensamientos como "debo ser responsable", "ahora soy un adulto", "construir siempre cuesta trabajo", y cosas así. No estoy comprendiendo de qué trata la vida. Mal vivo mi presente esperando vivir en un futuro. Y ese futuro nunca va a llegar, porque no existe.

¿Realmente necesito todo esto, o es mera ambición? Me acusaba de floja. Ahora me acuso de miope. No ciega, porque sé distinguir bien el color del oro verdadero, pero reconozco que me deslumbró su reflejo. Y, finalmente, el oro es sólo otro frío metal...



4 comments:

Nerea said...

¡Ah! Tu blog no me quería dejar comentar ¿es la venganza porque no podías ver el mío? :P

¿Qué te uedo decir? Yo extraño leerte(y leer a los demás, for that matter) sigo peleando para hacerme el tiempo y escribir, pero a veces siento que soy la única que lo hace y me entristece porque de repente escribo y sé que uds tardan mucho en entrar a leer, por lo mismo del trabajo y los pendientes. Me alegra que notes que te has quedado un tanto miope. Vivir en e futuro nso quita el presente. Todo llegará en su debido momento. Trabajar es bueno, ser adicto al trabajo no ;)

Emilia Kiehnle said...

Creeme, no soy NADA adicta al trabajo, jaja.

Y no te preocupes. Tú escribe, no esperes a que los demás lo hagamos ;)

Nerea said...

Noooo para nada adicta al trabajo... que te lo crea quien no te conozca...

Y yo sigo escribiendo y creo que cada vez más y más y más... dejé de esperarlos hace un ratote

Emilia Kiehnle said...

Es en serio!! No soy adicta. No me gusta nadita. Yo por mí echaba la feliz flojera todo el día, pero me he entrenado para obligarme a hacerlo.

De hecho, creo que he tocado el otro extremo, pues antes de que me conocieras yo tenía el trauma de ser muy floja. Todo me daba pereza y le huía al trabajo. Yo creo que por eso ahora me esfuerzo tanto, pues a veces me da miedo volver a caer (claro, no niego que últimamente exagero, pero ya estoy en proceso de bajarle al asunto).

Y, en cuanto a lo otro, si hubieras dejado de esperarnos, no nos reclamarías tantas veces por estos lares :P jaja. Prometo meterme seguido, pues yo también extraño escribir y leer a los demás.