Quiero estudiar, quiero hacer tesis, quiero trabajar en Eudoxa, quiero leer y escribir literatura, quiero escuchar música, quiero cuidar a mi novio, quiero ir a misa como prometí, quiero comer con mi familia, quiero procurar a mis amigos, quiero, quiero...
Dios, ¿por qué hiciste los días tan cortos? (¿y por qué permites que mi casa esté llena de gente y de ruido y de necesidades imperiosas como conseguir dinero para comprar tortillas...?).
Me pregunto si algún día lo urgente cederá espacio para lo importante.
Dios, ¿por qué hiciste los días tan cortos? (¿y por qué permites que mi casa esté llena de gente y de ruido y de necesidades imperiosas como conseguir dinero para comprar tortillas...?).
Me pregunto si algún día lo urgente cederá espacio para lo importante.
2 comments:
Jamás. Nunca lo hará. Por eso uno tiene que desterrar, muchas veces, lo urgente... pésele a quien le pese.
Coincido: lo urgente siempre va a desplazar a lo importante. Y tú has de desplazar a lo urgente para hacer lo importante. NO hay de otra.
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