Monday, March 24, 2008

Pluma Entintada está de regreso



Últimamente me ha costado mucho trabajo escribir. Mis cuadernos "elegantes" (los que no son rayados o cuadriculados para la escuela) están prácticamente abandonados. A penas publico algo en los blogs que no sean videos o imágenes, y los personajes de mis cuentos ya perdieron sus rostros.

Es extraño. De pronto, ya no me interesa tanto producir, sino aprender. Todo este tiempo de "bloqueo de escritor" lo he pasado leyendo, viendo películas y pensando mucho. Ha sido un tiempo de invierno, como dice Artemisia. Me he dedicado a invernar.

Pero ya llegó la primavera, según tengo entendido. Las jacarandas ya alfombraron la ciudad de lila y el mundo parece estar urgido de producción. Los pájaros hacen sus nidos, las plantas dan sus frutos y el filósofo sigue en la contemplación. No tengo nada en contra de la contemplación filosófica, pero en el fondo no soy tan aristotélica como parezco. Por eso decidí que ya es momento de sacudir la escarcha de mi pluma y dedicarme a lo mío: la escritura.

Desde muy niña descubrí la adictiva sensación de deslizar la pluma sobre el papel en blanco. Es como colorear un paisaje invisible o darle sabor a un objeto insípido. Es darle significado a un universo inmenso e infinito en posibilidades. Es como jugar ajedrez: las fichas y el tablero ya existen, pero lo demás es indeterminado.

Así, pues, denme la bienvenida de regreso, que ya no pienso dejar que mis letras se oxiden.